María Luisa o Magüi como le llamamos todos. Ella es la culpable de que tanto nuestros clientes como los tabajadores nos enamoremos de las Calas.
Sin ella, está claro que este Hotel no sería el hotel que es hoy en día.
Dedicó gran parte de su vida a trabajar y vivir en el Hotel, mucho esfuerzo, dedicación y sacrificio; siempre innovando, "trajiniando" , cambiando la decoración de las habitaciones, de aquí y de allá, con el fin de mejorar el día a día del cliente.
¡Ojo! Que esto no ha cambiado, ella sigue al pie del cañón aunque ya no viva aquí.
Gracias a ella y al amor que siente por los animales es que en este Hotel toda mascota es bienvenida.
Y como dato importante, nuestros menús de cena son recetas de ella, cuidadas al detalle y con cariño, porque es toda una buena chef.